Durante 2018, la Corte Suprema consolidó un importante cambio en su jurisprudencia sobre medicamentos de alto costo cuando se encuentra en riesgo la vida de un paciente. A partir del derecho a la vida, se sostiene que los pacientes tienen derecho a recibir aquellos medicamentos que requieren para sobrevivir en lo inmediato sin importar su costo. El objetivo de este trabajo es analizar este cambio jurisprudencial y sus consecuencias con respecto a la estructura de la acción de protección.